EL FUGITIVO
Luis bravo
Están vacíos, la vía láctea, el andén,
el gran reloj que sostiene.
Alguien que no se ve conduce la huida de la estrella,
el artefacto.
El tren que cae por la pendiente.
Entre las sombras una rebelión,
dicen, que ya no eres, sino
sólo una foto de ti sobre el espejo
harto de sí, su mismo igual, repetitivo.
El pez que grita bajo el agua infinita.
Congelado pasajero en el andén, al oído
el Olvido te susurra : "podrías morir ahora
y ningún dios negociará tus suertes".
Cobarde y seductor el fino puñal de atrás empuja.
No se ve la mano, la tuya, que lo sostiene.
O Fugitivo
Estão vazios, a Via Láctea, a plataforma,
O grande relógio que sustenta.
Alguém que não se vê conduz a queda da estrela,
o dispositivo.
O trem que que cai pela ladeira.
Entre as sombras uma rebelião,
diz, que já não é você, mas sim
só uma foto tua no espelho
farto de ti, a tu mesmo igual, repetitivo.
O peixe grita sob a água infinita.
O congelado passageiro na plataforma, escuta
o esquecimento que te sussurra: “poderias morrer agora
e nenhum deus negociará teu destino?”.
Covarde e sedutor o fino punhal por trás entra.
Não se vê a mão, a tua, que o sustenta.
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