Pablo Neruda
La luz que de tus
pies sube a tu cabellera,
La turgencia que envuelve tu forma delicada,
No es de nácar marino, nunca de plata fría:
Eres de pan, de pan amado por el fuego.
La harina levantó su granero contigo
Y creció incrementada por la edad venturosa,
Cuando los cereales duplicaron tu pecho
Mi amor era el carbón trabajando en la tierra.
Oh, pan tu frente, pan tus piernas, pan tu boca,
Pan que devoro y nace con luz cada mañana,
Bienamada, bandera de las panaderías,
Una lección de sangre te dio el fuego,
De la harina aprendiste a ser sagrada,
Y del pan el idioma y el aroma.
La turgencia que envuelve tu forma delicada,
No es de nácar marino, nunca de plata fría:
Eres de pan, de pan amado por el fuego.
La harina levantó su granero contigo
Y creció incrementada por la edad venturosa,
Cuando los cereales duplicaron tu pecho
Mi amor era el carbón trabajando en la tierra.
Oh, pan tu frente, pan tus piernas, pan tu boca,
Pan que devoro y nace con luz cada mañana,
Bienamada, bandera de las panaderías,
Una lección de sangre te dio el fuego,
De la harina aprendiste a ser sagrada,
Y del pan el idioma y el aroma.
Soneto XIII
A luz de teus pés sobe até teus cabelos,
O torpor que
envolve a tua forma delicada,
não é de pérola
marinha, nunca de prata fria:
és de pão, de pão
amado pelo fogo.
A farinha levantou
teu celeiro contigo
e cresceu
impulsionada pela idade venturosa,
quando os cereais
duplicaram teu peito
meu amor era de
carvão trabalhando a terra.
Oh, pão tua frente,
pão tuas pernas, pão tua boca,
pão que devoro e
nasce com a luz de cada manhã,
bem-amada, bandeira
das padarias,
Uma lição de sangue
deu-lhe o fogo,
da farinha aprendeste
a ser sagrada,
e do pão o idioma e
o aroma.
No comments:
Post a Comment