Virginia
Grütter Jiménez
Te
condeno
a
que sigas oyendo mi canto de campana
en
el mar, el agua, en el viento.
Te
condeno
a
que sigas mirando mis ojos doloridos
en
el sueño, en la luz, en el fuego.
Te
condeno
a
que escuches mi voz grave, amorosa,
en
las hojas, en los ríos, en el eco
Te
condeno
a
que lleves mi recuerdo en la vida,
en
la piel, en el alma, en el pecho.
MALDIÇÃO
Te
condeno
A
que sigas ouvindo a minha música de trabalho
no
mar, na água, no vento.
Te
condeno
a
que sigas a olhar meus olhos doloridos
no
sono, na luz, no fogo.
Te
condeno
a
que escutes a minha voz grave e amorosa,
nas
folhas, nos rios, no eco
Te
condeno
a
que leves minha recordação pela vida,
na
pele, na alma, no peito.
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